Hongos e Insectos xilófagos: Organismos que se alimentan de la madera deteriorándola. ¿Cómo distinguir a los más comunes?.
- Los hongos xilófagos producen básicamente tres tipos de pudriciones: blanca, blanda y marrón, fáciles de distinguir entre ellas. La primera se caracteriza porque el ataque enzimático del hongo decolora la madera, la segunda porque da un aspecto fibroso a la madera y la última por producir un cuarteado cúbico. Estos ataques suelen producirse en madera de exterior o en zonas muy húmedas.
- Entre los insectos xilófagos tenemos que distinguir entre los de ciclo larvario y los insectos sociales. Los primeros ponen los huevos en el interior de la madera (grietas), transformándose posteriormente en larvas (que son las que la dañan generando galerías mientras se alimentan de la celulosa, disminuyendo la resistencia de la pieza) y convirtiéndose finalmente en adultos que son los que salen al exterior por los orificios expulsando el serrín en su salida con el fin de aparearse y seguir con su ciclo reproductivo. Los segundos son incapaces de vivir en solitario, por lo que se organizan en castas con una función distinta cada una contribuyendo en conjunto al desarrollo de la comunidad.
- Los insectos de ciclo larvario más comunes son los líctidos (Lyctus brunneus), la carcoma común (Anobium punctatum) y la carcoma gigante (Hylotrupes bajulus). La diferencia entre ellos es el tamaño del orificio de salida (que va de menor a mayor) y el tipo de serrín que generan (similar a los polvos de talco, granulado y apelmazado en el interior de las galerías). La larva de la carcoma gigante se puede escuchar mientras se alimenta de la madera cuando la estancia se encuentra en silencio.
- Entre los insectos xilófagos sociales tenemos a la termita subterránea y a la termita de madera seca. La primera es la que daña nuestras viviendas de cuya madera se alimentan. La casta de las termitas obreras (muy similares a las hormigas pero de color blanco y sin cintura) van erosionando tanto la madera estructural como de carpintería de las viviendas en su búsqueda de celulosa, su alimento. Los daños se detectan al tocar la madera y notar que cede a la presión. Esto se debe a que huyen de la luz y necesitan humedad para sobrevivir. Nunca se ven fuera de la madera, sólo en su interior. Los daños suelen empezar en marcos de puertas y zócalos, aunque si no se tratan a tiempo pueden colonizar todo el inmueble incluyendo el tejado. Otra forma de distinguirlas son los enjambrazones (vuelos nupciales) de primavera. Son como hormigas aladas pero las termitas dejan las alas en el suelo y desaparecen enseguida buscando un sitio propicio donde crear un termitero. Los canales terrosos o de progresión también son muy característicos en zonas donde la termita no puede continuar por el interior y crea unos túneles con excrementos y tierra que les permiten mantener las condiciones de oscuridad y humedad que necesitan para sobrevivir.
Todos estos organismos pueden ser erradicados por empresas especializadas que deben disponer de autorización sanitaria para la aplicación de productos protectores de la madera (TP8) así como de responsables técnicos y técnicos aplicadores con formación específica para la aplicación de estos productos.
Begoña González Maseda
Directora Técnica
